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El poeta ha fallecido en Madrid a los 76 años, tras una larga enfermedad, justo cuando se cumplen 50 años de la publicación de “Las piedras”, obra con la que ganó el premio Adonais un año antes.
Nacido en Mérida (Badajoz), se crio en Tomelloso (Toledo) y se trasladó a Madrid a los 20 años. En 1961 comenzó a trabajar con Luis Rosales en “Cuadernos hispanoamericanos”, la revista cultural más importante de aquella época, en la que trabajó durante 35 años, 13 de ellos como director. Durante esa etapa publicó varios ensayos y dos libros de poesía: “Blanco spirituals” (1967) y “Las rubáiyatas de Horacio Martín” (1978).
Entre sus obras, traducidas a más de una docena de idiomas, destacan “Música amenazada” (1966), “Taranto” y “Homenaje a César Vallejo” (1971), “Años” (1975), “En secreto” (1978), la novela “Las calles” (1980), “La noria” (1986), “Cuaderno” (1993), y “La memoria en llamas” (2004). Su último trabajo fue el poemario “Libro de familia” (2012).
Considerado uno de los grandes renovadores de la poesía, fue además ensayista y narrador, además de un gran investigador del flamenco, actividad a la que dedicó sus últimos años como conferenciante. De esa etapa son los ensayos “La vida breve” (1985), “García Lorca y el flamenco” (1992), y “Paco de Lucía y Camarón de la Isla” (1998).
A lo largo de su trayectoria obtuvo numerosos premios de poesía, como el Alcaraván en 1962, el Casa de las Américas en 1967 y el Manuel Alcántara en 1996. En narrativa fue reconocido con el Eugenio D’Ors en 1965, el Gabriel Miró en 1966, el Barcarola en 1989 y el Premio Extremadura a la Creación en 2004, año en el que también se le otorgó el Nacional de las Letras Españolas.