Todo el mundo habla últimamente de esta novela: “El despertar de la señorita Prim”, y la verdad es que está empezando a picarme la curiosidad.
La editorial Planeta lo presenta y resume su argumento con esta frase: “Una deliciosa historia sobre la belleza de las pequeñas cosas”. Suena muy sugerente, y a priori, parece una historia diferente, y sólo por eso merecería una oportunidad.
Esta primera novela de Natalia Sanmartín Fenollera nos traslada a San Ireneo de Arnois, una pequeña localidad cuyos habitantes han declarado la guerra a la modernidad. Prudencia Prim acepta allí un trabajo como bibliotecaria.
Concretamente, debe organizar la Biblioteca del Sillón, un hombre culto e inteligente, pero falto de delicadeza. A pesar de las continuas diferencias con su jefe, la protagonista irá descubriendo las ventajas del lugar y acabará por apreciar su modo de vida.
Suena bastante bien, y creo que se debe tener en cuenta de cara a futuras lecturas. Me parece, además, que va a ser uno de esos libros que funcionan gracias al “boca a boca”, como ya pasó, por ejemplo, con “La sombra del viento” o “El tiempo entre costuras”.
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