Lo primero que tengo que resaltar sobre esta trilogía de Matilde Asensi, es mi agradecimiento a la editorial Planeta por publicarla en un solo volumen. De este modo, he podido leerla de un tirón, al contrario que con otras trilogías que, entre la publicación de uno y otro volumen, he perdido un poco el hilo de la historia.
La serie formada por “Tierra firme”, “Venganza en Sevilla” y “La conjura de Cortés” ya es conocida por más de un millón de lectores. Y este número seguirá creciendo porque Asensi es una de las escritoras más leídas en nuestro país (y parte del extranjero), y porque tiene la habilidad de enganchar al lector.
En esta ocasión nos presenta una historia de piratas en el Siglo de Oro español (siglos XVI y XVII); una época en la que el reinado de Felipe III se extendía al otro lado del océano, y las luchas en el mar eran habituales para controlar el tráfico de mercancías entre el viejo y el nuevo mundo. También los actos de piratería, que han propiciado numerosas novelas y películas.
La protagonista es una mujer, Catalina Solís, que debe hacerse pasar por hombre debido a los giros del destino. No es una invención de la autora, hubo más de una dama que se dedicó a este tipo de actividades.
En la primera de las novelas, Catalina huye de los piratas que asaltan el barco que la llevaba a Tierra Firme (así se denominaban las poblaciones cercanas al Mar Caribe), y termina sola en una isla. Un comerciante la rescata y la hace pasar por su hijo, de modo que adopta el nombre de Martín, en honor a su hermano fallecido.
En “Venganza en Sevilla”, su padre adoptivo muere a consecuencia de las tretas urdidas por una poderosa familia de comerciantes, los Curvo. Catalina/Martín jura vengarse de todos ellos, y para ello jugará con sus dos personalidades. Y llegamos a “La conjura de Cortés”, donde vuelve al Nuevo Mundo para culminar su venganza, ya convertida en Martín Ojo de Plata, y ayudará a desbaratar una conjura contra el reinado de Felipe III.
Esto es un resumen somero de la trilogía, no quiero desvelar más por respeto a quienes tienen pensado leerla. Lo que sí tengo que decir es que Asensi ha retratado con maestría las costumbres de la época tanto en España como en América, que acompaña la narración con oportunas notas a pie de página que aclaran términos y hechos propios de entonces, y que el ritmo es ágil y directo. Eso sí, una apreciación personal: los dos primeros libros me han parecido más amenos que el tercero.
Y por último, es muy interesante el prólogo de la autora que han incluido en esta edición, al igual que la cronología de los hechos históricos de la época en que se desarrolla la novela, y el material que Matilde Asensi utilizó para escribirla.
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