El autor de “El jardinero fiel” y “El espía que surgió del frío” se ha hecho de rogar, pero ya está de nuevo en las librerías con “Una verdad delicada” (Plaza y Janés) en la que nos adentra en los complejos mecanismos que rigen la política internacional, de la mano de un agente retirado del Foreign Office.
Ese agente es Kit Robyn que, desde su retiro en Cornwell, y gracias a la visita de un antiguo compañero, duda del resultado de una operación acometida en 2008 en Gibraltar. Entonces, su jefe le ordenó viajar al Peñón para ser testigo del gobierno británico en el intento de impedir la venta de armas a un grupo terrorista.
Tras esta actuación, fue enviado al Caribe con un puesto cómodo y nombrado Sir por la reina de Inglaterra. Ahora, ya jubilado y residente en Cornwell, recibe la visita de un compañero. Lo que le cuenta le hace dudar de lo que realmente ocurrió. Tendrá que averiguar qué pasó realmente, y al tiempo deberá vivir con la culpabilidad personal, su conciencia y un dilema moral.
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