Acostumbrados a detectives e investigadores privados con problemas de alcoholismo y vidas personales desastrosas, los lectores de novela policíaca agradecemos toparnos con un protagonista radicalmente opuesto. Y ése es Víctor Ros, el policía creado por Jerónimo Tristante. Un hombre de origen humilde, hecho a sí mismo, con una vida intachable y una relación estable.
Su primer caso fue “El misterio de la Casa Aranda ” (2008), ambientada en el Madrid del siglo XIX. La citada casa parece inducir a las mujeres que habitan en ella a matar a sus esposos. El protagonista deberá descubrir si hay algo paranormal en la vivienda, o si es algo mucho más terrenal.
En “El caso de la viuda negra” (2008), debe aclarar el robo del anillo de un cadáver, algo en principio inexplicable porque el cuerpo estaba custodiado por dos guardias que aseguran no haber visto nada. Al mismo tiempo, investigará la muerte del Marqués de Estrada, que parece haber sido envenenado por su esposa.
La última de sus aventuras, hasta ahora, ha sido “El enigma de la calle Calabria” (2010) ambientada en Barcelona. Un rico empresario “se evapora” de camino a la estación de Sants, sin que su cochero se dé cuenta. Ros acude a la Ciudad Condal a petición de su amigo Alfredo Blázquez, ya que el desaparecido es el marido de su prima. Durante la investigación recorreremos los ambientes más elegantes y también los barrios bajos de la Barcelona de 1881.
Jerónimo Tristante nació en Murcia en 1969, y trabaja como profesor de Biología y Geología. Tras la publicación de un su primera novela, “Crónica de Jufré”, ha escrito varias más, como “1969” , “El valle de las sombras” o “El tesoro de los nazareos”, además de la serie protagonizada por Victor Ros. Sus obras han sido traducidas al italiano, al polaco y al francés.
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