Las pesquisas que Montalbano y su equipo realizan precipitan una serie de acontecimientos que transcurren de manera caótica: cartas anónimas, pistas contradictorias, delaciones…El protagonista sospecha que alguien intenta guiar sus pasos para confundirle y manejarle, alejándole de la verdad de los hechos.
A ello hay que sumar la aparición de Liliana, la nueva vecina del comisario, una mujer espectacular cuyo marido se ausenta a menudo por razones de trabajo. Su presencia hará que Montalbano se sumerja en un mar de confusión que complicará su trabajo.
En “Juego de espejos” (Salamandra), Camilleri mezcla realidad e ilusión para rememorar la escena de los espejos de “La dama de Shanghai” de Orson Welles, en la que sólo una imagen es la auténtica. Montalbano deberá recurrir a su veteranía y su intuición para escapar de ese entramado de reflejos que pretenden confundirle.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Lo has leído? ¡Comenta y da tu opinión!