Esta novela de Marian Izaguirre es, además de una historia de ficción, un pequeño homenaje a los libros y al enorme beneficio que nos pueden reportar. Los libros son, en este caso, tan protagonistas como los personajes principales.
La trama se divide en dos historias. Por un lado, la de Lola y Matías, un matrimonio que posee una librería de viejo y que no pasan por su mejor momento. Lola trabará amistad con Alice, una misteriosa mujer que intenta ayudarles sin que ellos lo sepan.
La otra historia es la que narra “La chica de los cabellos de lino”, un libro que ha aparecido en la tienda y que Lola y Alice leen juntas.
Esta alternancia entre los dos relatos da mucha agilidad a la novela, y hace que el lector siga pasando las páginas para saber qué oculta Alice, y quién es esa muchacha a la que hace referencia el título del libro.
Pero también hay que resaltar el homenaje que la autora ha querido hacer a todas aquellas novelas que han quedado como clásicos de la literatura, y a la lectura en general, como método de entretenimiento, como compañía en los malos momentos, como vehículo para los recuerdos de toda una vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Lo has leído? ¡Comenta y da tu opinión!